El Pacto Verde Europeo busca alcanzar la neutralidad climática en 2050 de una forma que contribuya a la economía, al crecimiento y al empleo en Europa. Con el objetivo de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero al 55 % de aquí a 2030, se propone modificar la Directiva Europea de Energías Renovables para elevar del 32 % al 40 % la energía procedente de fuentes renovables.

Ante este nuevo escenario, el eurodiputado Nicolás González Casares y el regidor ferrolano Ángel Mato Escalona se reunieron en Ferrol este 28 de enero con varios de los principales actores gallegos del sector energético.

Nicolás González trasladó a los presentes que buscarán “ser ambiciosos en la descarbonización para crear nuevos empleos verdes en este sector de forma equilibrada con el territorio”. En la misma línea se pronunció el alcalde de Ferrol, Ángel Mato: “las energías limpias mejoran nuestra calidad de vida, generan empleo y permiten que el tejido industrial sea más competitivo; tenemos un ecosistema industrial para hacerlo posible”.

La jornada de trabajo contó también con la intervención, a través de videollamada, de Antonio López-Nicolás, subjefe de la Unidad de Energías Renovables y Política de Integración de Sistemas Energéticos en la Dirección General de Energía de la Comisión Europea. López-Nicolás explicó las principales medidas que contempla la Revisión de la Directiva Europea de Energías Renovables. Destaca el aumento de la integración de las energías renovables en campos como el del transporte, la construcción o la industria. Se impulsa, por ejemplo, el uso de hidrógeno renovable hasta el 50 % en la industria y el uso de las energías renovables en los edificios 2030 hasta el 49 %. “La transformación energética beneficia a la ciudadanía, a la industria y a la economía”, incidió López-Nicolás que ve en las comunidades energéticas y el autoconsumo como fórmulas fundamentales.

A la reunión asistieron representantes del Instituto Tecnológico de Galicia, Navantia, Cluergal, Iberdrola, EnergyLab, Aclunaga, Ampier, Asime y el Colegio Oficial de Ingenieros Industriales de Galicia. Trasladaron sus inquietudes para que la transición energética fije industria en Galicia, apueste por el equilibrio entre grandes y pequeños productores de energías renovables y se promueva la sostenibilidad a nivel medioambiental, económico y social.  También para que la Administración expida normas claras que den seguridad a los inversores.