Presentación del “Estudio del Impacto Macroeconómico de las Energías Renovables en España” de APPA
El “Estudio del Impacto Macroeconómico de las Energías Renovables en España”, realizado por Deloitte para APPA Renovables, ha sido presentado este 25 de octubre en Madrid por Santiago Gómez Ramos, presidente, y José María González Moya, director general de APPA. El estudio concluye que las energías renovables en España han conseguido en 2023 un ahorro económico importante, similar al récord alcanzado el año anterior.
En el sector eléctrico, se registró un ahorro neto de 9.575 millones de euros, mientras que el ahorro global en energía alcanzó niveles superiores a 2022, a pesar de una ligera caída en el valor de los ahorros en importación de combustibles fósiles, que se situaron en 15.622 millones de euros, y un ahorro en emisiones de CO₂ equivalente a 5.586 millones.
El año 2023 se destacó sobre todo por un hito importante como que la generación renovable superó el 50% de la electricidad total generada en el país, contribuyendo a un ahorro récord en el sistema eléctrico, gracias al efecto depresor de los precios de las renovables en el mercado mayorista, que ahorró al sistema 12.745 millones de euros. Se evitó la importación de 25 millones de toneladas equivalentes de petróleo, superando las 21,4 millones de 2022.
Sin embargo, también se observó una leve desaceleración en algunos sectores, como el autoconsumo, que redujo su potencia instalada un 27%, y la energía eólica, que ha visto caer sus nuevas instalaciones a la mitad.
Esta ralentización, combinada con una reducción en los precios de la energía, provocó una contracción en la aportación al PIB sectorial, que alcanzó los 16.495 millones de euros, el tercer valor más alto en la serie histórica, y representó el 1,13% del PIB nacional. Además, el empleo en el sector renovable también experimentó un ligero descenso, del 2,5%, ubicándose en 127.576 puestos de trabajo.
Para alcanzar los objetivos del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), el Presidente destacó la importancia de impulsar la electrificación de la demanda, así como el desarrollo de tecnologías de almacenamiento energético y la flexibilidad en la demanda. La meta es atraer industrias electrointensivas que permita equilibrar la oferta y demanda y optimizar el potencial renovable del país, especialmente en sectores como el térmico y el transporte.