Apostar por las energías renovables en Galicia
Dedicábamos el número anterior a la energía del mar y en éste también tiene especial relevancia. No es casual. El mar tiene una gran importancia para Galicia que cuenta con una industria naval de referencia y donde además ha existido un fuerte desarrollo de las energías renovables, principalmente energía eólica. Las enormes posibilidades de la energía del mar en nuestra comunidad son evidentes.
Las malas noticias que vienen de Bruselas referentes al “tax lease” del sector naval y desde Madrid con la controvertida reforma energética del Gobierno que paraliza definitivamente las renovables en España, proceso ya iniciado en enero de 2012 (Real Decreto Ley 1/2012), son obstáculos que deben superarse con la fuerte apuesta de la administración autonómica y de las empresas. Como precedente queda la apuesta que ha realizado el Parlamento de Galicia por la biomasa este año.
Con un Plan Eólico completamente paralizado las únicas oportunidades de desarrollo en este campo vienen mediante el mantenimiento y la operación, además de oportunidades de mejora en los parques como es el caso de la compensación de potencia de energía reactiva.
Con un panorama tan sombrío, celebramos la convocatoria de unas Jornadas Gallegas de Energías Renovables, a realizarse en Vigo durante este mes de septiembre, que suponen un interesante punto de reunión y foro de reflexión para un sector que debe seguir siendo una apuesta por parte de nuestra sociedad. Seguir condicionando nuestra economía a los combustibles fósiles puede tener ventajas en forma de ahorro a corto plazo pero además de los problemas de sostenibilidad a los que se asocian, generan una fuerte dependencia energética del exterior y no crean empleo ni riqueza interior de la misma manera.
Si bien es cierto que la política de primas a las renovables pudo no ser del todo acertada, el castigo al que se somete al sector es excesivo y amenaza con su desaparición. Una clara apuesta por el autoconsumo y el balance neto hubiese dado alguna oportunidad de reinvención pero desafortunadamente ha sido ignorada en la última reforma energética pese a las directrices europeas. Es probablemente otra oportunidad perdida que nos situará otra vez en el vagón de cola en cuanto a innovación se refiere.
(Editoral de Fernando Blanco Silva, director de Dínamo Técnica, para el número 12 de la revista, publicado en septiembre de 2013).