Iberdrola incrementa su compromiso con Galicia
El impacto socioeconómico de Iberdrola en Galicia alcanzó los 411 millones de euros en 2023, un 11,5% superior al de 2022. Incluye las inversiones, los salarios, la contribución fiscal y los pagos a proveedores. La eléctrica realizó compras y contrataciones de servicios a 241 proveedores gallegos por un valor de 183 millones euros en 2023. Una actividad económica que se realiza gracias a los 217 empleados que trabajan en Galicia.
Iberdrola dispone en Galicia de una potencia de 2.217 MW. De ellos, 2.208 MW son renovables (se dividen principalmente en 1.582 MW de capacidad hidráulica y 626 MW de eólica terrestre). Cuenta con actividad de generación en las cuatro provincias: Ourense (1.690 MW a través de 25 instalaciones), Lugo (288 MW en 9 instalaciones), Pontevedra (130 MW en 3 instalaciones) y A Coruña, (99 MW en 3 instalaciones).
Además, la compañía dispone ya de todos los permisos y autorizaciones previas para la mejora y optimización de la central de acumulación por bombeo de Santiago Sil – Xares. El proyecto consiste en la instalación de un arrancador estático y una batería de 5 MWh que permitirá flexibilizar el acoplamiento a la red de los grupos reversibles de bombeo existentes.
Se trata de un proyecto innovador en España, siendo el primero de estas características que se autoriza. El proyecto permitirá acoplar a la red de forma más rápida y flexible el actual bombeo hidroeléctrico entre los ríos Sil y Xares, con un desnivel de 230 m, 50 MW de potencia y una capacidad de almacenamiento hidroeléctrico de casi 3 GWh (3.000 MWh).
Inversiones para impulsar la electrificación
La compañía se ha comprometido a invertir 6.000 millones de euros entre 2024-2025 en España para impulsar la electrificación de la economía, ante la llegada de los nuevos usos de la demanda de energía. La electrificación es fundamental para incrementar la autosuficiencia energética, la descarbonización, la eficiencia y competitividad de las empresas.
Iberdrola sigue avanzando en su compromiso con la autosuficiencia energética y en su papel proactivo como agente activo en la lucha contra el cambio climático. En su Plan estratégico, la compañía contempla compatibilizar su crecimiento en renovables y redes con el objetivo de llegar a ser neutra en carbono para 2030 en sus centrales de generación y consumos propios y en todas sus actividades antes de 2040.