Iberdrola y su apuesta por la eólica marina con marca gallega
El aprovechamiento de la energía eólica marina para producir electricidad juega un papel fundamental en el actual proceso de transición energética que se está llevando a cabo a nivel mundial. Por un lado, porque contribuye a reducir la dependencia de los combustibles fósiles, y con ello la emisión de gases efecto invernadero, y por otro, porque garantiza el suministro eléctrico y genera empleo.
Iberdrola lleva más de una década apostando también por esta modalidad de energía renovable que requiere de la instalación de impresionantes infraestructuras en mar abierto, dotadas con aerogeneradores y plataformas de grandes dimensiones equipadas con la última tecnología. El diseño, la construcción, el transporte y el montaje suponen un reto técnico perfeccionado con la experiencia que requiere un proceso largo encaminado hacia la electrificación y la descarbonización de la sociedad, la industria y la economía. La Agencia Internacional de la Energía señala que en 2040 la mitad de la eólica de Europa será marina.
Hace cerca de una década que la compañía eléctrica confió en Navantia como su aliado industrial para fabricar los componentes de su eólica marina, como cimentaciones para aerogeneradores y subestaciones. Desde entonces Navantia Seanergies Fene y Windar Renovables han estado suministrando “jackets” y “monopiles” para parques eólicos marinos de Iberdrola. El astillero de Fene -antiguamente Astano- que fue durante años uno de los motores de la comarca, y uno de los principales protagonistas de sus economías locales, ha recuperado su papel como propulsor de empleo, riqueza, economía y desarrollo industrial y tecnológico de Ferrolterra, y de Galicia en general, gracias a la colaboración Iberdrola-Navantia. La vieja Astano, muy afectada por la reconversión del sector naval, es ahora escenario de la fabricación de gran parte de los componentes necesarios para el montaje de parques eólicos.
Principal inversor de la economía gallega
Se estima que gracias al compromiso con Iberdrola, Navantia ha contribuido a aumentar considerablemente el número de empleos locales vinculados a la eólica marina en Galicia. Los encargos de la compañía eléctrica, junto con otras inversiones y pagos en hidráulica y eólica, convierten a la energética en uno de los principales inversores económicos e industriales de Galicia.
La eólica marina y la eléctrica han sido determinantes para el despertar industrial, económico, social, demográfico y vital de Ferrol y su comarca. Como se ha dicho anteriormente, desde la década de los 80 la ciudad sufrió diversos altibajos debido a la caída del sector naval. Hoy en día se recupera gracias al impulso de la eólica marina y a empresas como Iberdrola que han apostado por las instalaciones de la recordada Astano, hoy plenamente reformadas y adaptadas con lo último en tecnología, para construir sus infraestructuras e impulsar de nuevo a la ciudad, y a Navantia Fene, como referente en el mercado y en la fabricación de cimentaciones fijas y flotantes. El astillero cuenta con carga de trabajo comprometida para varios años, un compromiso que implica además a universidades, campus industriales, centros tecnológicos, etc.
Marca Galicia en aguas francesas
El pasado mes de mayo, Iberdrola puso en marcha el parque eólico marino de Saint Brieuc, en la Bretaña francesa. Sus cimentaciones y estructuras han sido construidas por Navantia-Windar en los astilleros de Fene. Inaugurado recientemente por el presidente de la eléctrica, Ignacio Sánchez Galán, cuenta con 62 aerogeneradores que reposan sobre cimentaciones tipo “jacket” que con turbinas de 8 MW son las más potentes instaladas en una planta eólica marina en Francia hasta la fecha, ya que Iberdrola ha instalado turbinas de 9,5MW en Baltic Eagle, en el mar Báltico, y se están construyendo East Anglia3 y Windanker para turbinas de 15MW.
Saint-Brieuc es el tercer parque desarrollado en Fene para Iberdrola. Anteriormente, la compañía confió a Navantia-Windar, en colaboración con otras empresas del sector nacionales e internacionales, la construcción de 29 plataformas eólicas para su proyecto de Wikinger (Mar Báltico, 350 MW), entre los años 2015 y 2016, así como la ejecución de 42 jackets para el parque East Anglia One (714 MW), en Reino Unido, entre 2017 y 2018. La alianza empresarial está construyendo en la actualidad las cimentaciones de East Anglia Three, en Reino Unido, y Windanker, en el Báltico alemán.
Los cinco parques, Wikinger, East Anglia One y Saint Brieuc, ya terminados, y East Anglia 3 y Windanker, en ejecución, han supuesto una inversión de 952 millones de euros.
La última gran apuesta
Windanker es el último de los retos de Iberdrola para su construcción en Galicia. El astillero de Fene fabricará 21 “monopiles” para el parque eólico, el tercer proyecto a gran escala de la compañía en el mar Báltico alemán. Se trata del segundo contrato para Iberdrola y del cuarto de este tipo de cimentaciones para la alianza Navantia-Windar hasta la fecha. Con este contrato, Iberdrola y Navantia Seanergies-Windar Renovables demuestran su liderazgo en el mercado eólico marino y consolidan cerca de una década de trabajo conjunto. Se estima que la fabricación generará muchos cientos de puestos de trabajo en una comarca que poco a poco recupera el pulso de los años perdidos
Reportaje publicado en el Nº 32 de Dínamo Técnica, de octubre de 2024.