Las principales industrias calorintensivas de España —alimentarias, papeleras, químicas, cerámicas, textiles y más— esperan con incertidumbre la votación en el Congreso de los Diputados sobre la ampliación de la vida útil de sus cogeneraciones. Esta votación, crucial para que puedan realizar inversiones alineadas con el Plan Nacional de Energía y Clima 2021-2030, está prevista para el próximo jueves 12 de diciembre.  La aprobación de esta medida beneficiaría a más de 150 industrias, mayoritariamente pymes, que sostienen más de 40.000 empleos directos.

La cogeneración ha experimentado un retroceso del 38% en los últimos tres años debido al agotamiento de su vida regulatoria y la falta de subastas para un nuevo marco retributivo. El retraso de tres años por parte del Ministerio para la Transición Ecológica en convocar subastas de 1.200 MW de cogeneración ha dejado al 25% del sector sin retribución, una cifra que podría alcanzar el 50% en dos años. Esta situación pone en riesgo la competitividad de las industrias españolas frente a sus competidores europeos, como Italia y Alemania, que lideran en el uso de esta tecnología clave para la transición energética y la sostenibilidad industrial.

La industria española reclama una solución urgente para poder mantener sus operaciones mientras esperan las subastas y poder planificar las inversiones necesarias para adaptarse al uso de gases renovables e hidrógeno a gran escala. El sector industrial advierte del riesgo de deslocalización y pérdida de empleos frente a una Europa que apuesta decididamente por la cogeneración.