La Hoja de Ruta de los minerales, clave para la transición energética
La Hoja de Ruta para la gestión sostenible de las materias primas minerales ha sido aprobada el pasado 30 de agosto por el Consejo de Ministros. Busca reforzar la autonomía estratégica de España y la seguridad de abastecimiento de suministros clave para la transición energética y el desarrollo digital.
Avanzar hacia una sociedad neutra en emisiones de carbono exige aumentar el consumo de algunas materias primas. Para un sistema energético renovable y una economía electrificada y digital, se estima un aumento excepcional en la demanda de ciertos minerales hasta 2040. Es el caso del litio, cuya demanda se multiplicará por más de 40 y otros minerales como el grafito, el cobalto o el níquel, en torno a un 20 ó 25.
Por otra parte, las crisis provocadas por el Covid-19 y la guerra en Ucrania han expuesto vulnerabilidades que afectan a la seguridad nacional y al bienestar de los ciudadanos. Principalmente la dependencia del abastecimiento exterior y la fragilidad de los flujos comerciales internacionales.
Sin una autonomía de suministro para estas materias primas clave con criterios de sostenibilidad, España y su economía permanecerán en una situación de extrema vulnerabilidad. La producción actual de estos minerales se concentra en pocos países. Por ejemplo, China procesa alrededor del 35% del níquel, del 50% al 70% del litio y el cobalto, y casi el 90% de las tierras raras.
España cuenta con unas 4.650 explotaciones mineras y fábricas, con un volumen de negocio de unos 26.600 millones de euros anuales y unas exportaciones valoradas en 11.800 millones al año. Hay producción de estroncio, espato flúor, tántalo, silicio y wolframio, y depósitos identificados de antimonio, barita, bismuto, cobalto, litio y tierras raras.
Orientaciones estratégicas y líneas de actuación de la Hoja de Ruta
Esta Hoja de Ruta se alinea con las políticas europeas sobre materias primas. Entre ellas destacan el Plan de Acción de Materias Primas Fundamentales o el reciente REPowerEU. También con herramientas nacionales, como la Estrategia de Seguridad Nacional aprobada el pasado mes de febrero o la Estrategia de Descarbonización a Largo Plazo 2050.
La Hoja de Ruta se articula alrededor de tres principios:
- Eficiencia, para reducir el consumo de materias primas.
- Circularidad, para incrementar el aprovechamiento de materias primas secundarias.
- Sostenibilidad, de modo que la actividad extractiva se desarrolle empleando las mejores técnicas disponibles.
La Hoja de Ruta se articula alrededor de cuatro orientaciones estratégicas.
- Eficiencia y economía circular en las cadenas de valor del suministro de materias primas minerales, integrando y concretando para la industria extractiva los objetivos y líneas de actuación de la Estrategia España Circular 2030.
- Impulsar y consolidar la gestión sostenible de las materias primas minerales en la industria extractiva española.
- Garantizar la seguridad de suministro y el cumplimiento de los requisitos medioambientales, geoestratégicos y de justicia social en la importación de materias primas minerales.
- Fomentar la industria de materias primas minerales de carácter estratégico para la transición energética y digital, por su empleo masivo en la implantación de energías renovables, baterías para vehículos eléctricos o almacenamiento a medio y largo plazo de energía, alineándose con las políticas europeas de acceso a los recursos y sostenibilidad.
La Hoja de Ruta incluye 46 líneas de actuación que se clasifican según dos variables, su naturaleza y su adecuación a alguna de las cuatro orientaciones estratégicas. Según su naturaleza:
- Instrumentos regulatorios para un nuevo marco normativo del sector.
- Instrumentos sectoriales.
- Instrumentos transversales.
- Impulso a la I+D+i.
A través de esta Hoja de Ruta para la gestión sostenible de las materias primas minerales, España mejorará su autonomía estratégica con una actividad extractiva circular, segura y eficiente. Se mejorará la competitividad de las empresas, colaborando activamente para alcanzar los objetivos de la transición energética.
Ver documento: Hoja de Ruta para la gestión sostenible de las Materias Primas Minerales