Genesal Energy asegura el suministro energético en un centro de datos en Noruega
Genesal Energy ha logrado un nuevo hito en el ámbito de la energía distribuida al desarrollar cinco grupos electrógenos personalizados que garantizan un suministro continuo y seguro en uno de los centros de datos más destacados de Noruega. Estas unidades, capaces de proporcionar una potencia de 3000 kVA DCP, han sido diseñadas para enfrentar las estrictas exigencias técnicas y normativas del sector, asegurando la protección de grandes volúmenes de datos críticos.
La empresa española ha reforzado su presencia en el mercado europeo mediante la creación de soluciones innovadoras, demostrando su liderazgo en la protección de infraestructuras digitales. La colaboración con los fabricantes Baudouin, ComAp y Friga-Bohn ha sido clave para el éxito de este proyecto, que no solo garantiza el suministro eléctrico ante posibles cortes de red, sino que también cumple con los más altos estándares de eficiencia y seguridad.
Uno de los aspectos más destacados del proyecto ha sido la capacidad de personalización. Genesal Energy diseñó un sistema que incluye un contenedor con medidas especiales, un sistema de filtración de alta capacidad y un silenciador optimizado para cumplir con normativas de ruido. Además, se implementaron soluciones avanzadas en cuanto a refrigeración y protección contra incendios, elementos cruciales en este tipo de instalaciones.
La creciente dependencia de los centros de datos para el funcionamiento de las empresas a nivel mundial hace que cualquier interrupción en el suministro eléctrico pueda tener consecuencias graves, desde pérdidas financieras hasta la posible pérdida de información valiosa. Por ello, la inversión en sistemas de emergencia como los grupos electrógenos es esencial para garantizar la continuidad operativa y la seguridad de los datos.
Genesal Energy continúa consolidándose como referente en el sector de los Data Centers gracias a su apuesta por la innovación y la personalización de soluciones energéticas. Este proyecto en Noruega es un claro ejemplo de cómo la alta ingeniería y la especialización pueden asegurar el futuro de la infraestructura digital, asegurando el correcto funcionamiento de uno de los activos más valiosos de las empresas: sus datos.